Las altas temperaturas propician la reproducción del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue. En este contexto, la Dirección de Bromatología brinda información sobre esta enfermedad, y recuerda las pautas a tener en cuenta para prevenir su propagación y minimizar las probabilidades de contagio.

El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito antes mencionado, que se cría y vive en lugares sombríos y húmedos, por lo que cualquier recipiente con agua estancada es el ambiente ideal para su reproducción. Por eso es importante eliminarlos. Las cubiertas de automóviles, los tanques de agua, los platos bajo las macetas, los floreros y las plantas en frascos con agua son criaderos muy frecuentes en viviendas, oficinas, escuelas y hospitales.

La principal medida de prevención es evitar la formación de criaderos de mosquitos. Por ello, se recomienda mantener el orden y la higiene de los patios y terrenos baldíos, mantener el pasto corto, evitar juntar agua de lluvia o, en caso que esto resulte indispensable, no almacenarla por más de tres días, cepillando todo el recipiente antes de recoger agua nuevamente, cambiar el agua de los bebederos de animales diariamente, no dejar recipientes sin tapar en el patio, no juntar chatarra y elementos en desuso.

El dengue acarrea fiebre, acompañada de uno o más de los siguientes síntomas: dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones, náuseas y vómitos, cansancio intenso, aparición de manchas en la piel, picazón y/o sangrado de nariz y encías. Ante estos síntomas se debe acudir al centro de salud de inmediato para recibir el tratamiento adecuado.

Es importante no automedicarse. No tomar aspirinas, ibuprofeno, ni aplicar medicamentos inyectables. Lo más conveniente es consultar a personal médico, que prescribirá la medicación adecuada.

No hay vacuna ni tratamiento específico para el dengue. Por ello, el tratamiento es fundamentalmente sintomático. A las personas infectadas se les recomienda tomar abundante agua para reponer líquidos y realizar control y seguimiento médico diarios.

Desde la Dirección de Bromatología se recuerda que días pasados, se llevó a cabo una capacitación sobre «Implementación de un sistema de vigilancia del mosquito vector del dengue en Olavarría»; la cual contó con la participación de personal de las direcciones de Atención Primaria de la Salud, Epidemiología y Bromatología.

Dicha actividad fue dictada por Darío Vezzani, investigador del CONICET y Doctor en Ciencias Biológicas, del Instituto Ecosistemas de la UNICEN en Tandil. La capacitación comprende un trabajo de campo de colocación de ovitrampas para el monitoreo del mosquito transmisor del dengue, en distintos puntos de la ciudad, el cual va a tener continuidad en el tiempo, a los fines de contar con un diagnóstico de la situación actual.