Desde la Subsecretaría de Seguridad de la Municipalidad de Olavarría se informó que durante el transcurso del último fin de semana permanecieron activos los controles y esfuerzos preventivos en materia de seguridad vial, mediante la realización de diversas tareas en puntos estratégicos de la ciudad, en labores realizadas desde el área de Tránsito y la Dirección de Control Urbano Municipal, con la colaboración de agentes de la policía Local.

 

Tal como viene sucediendo desde hace ya algunas semanas, el énfasis estuvo en los controles de alcoholemia, realizándose cerca de un centenar (92) de testeos de esta índole. Fueron 3 los conductores sorprendidos con valores de alcohol en sangre por encima del dosaje permitido, mientras que una cuarta persona, puntualmente un motociclista, se negó a practicarse el control, por lo que se lo infraccionó y se le retuvo la moto.

 

El valor más alto (2.13 g/l) correspondió al conductor de un Volkswagen Bora, quien fue interceptado sobre Cerrito al 3400. Los restantes fueron en Álvaro Barros al 900, donde el test al conductor de un Fiat Siena arrojó 1.19 g/l. Por último, en avenida Colón al 1500 un motociclista dio un dosaje de alcohol en sangre de 0.59 g/l. Se recuerda que para motociclistas el máximo de alcohol en sangre es de 0.2 g/l.

 

En total, durante el fin de semana se interceptaron e identificaron 149 rodados entre automóviles y ciclomotores, marco en el que se labraron 48 actas en las que se marcaron 103 ítems de infracción a la Ley Nacional de Tránsito.

 

Se detalló que se retuvieron 5 automóviles, 8 ciclomotores y 3 licencias de conducir.

 

Por último, se añadió que también se realizaron labores en materia de nocturnidad. Al respecto se puntualizo que se dio respuesta a más de 30 llamados y denuncias ante el Centro de Monitoreo Municipal por ruidos molestos, lo que dio lugar al inicio de varias actas de infracción por superar los decibeles permitidos, las cuales fueron elevadas ante el Juzgado de Faltas local.