La Secretaría de Salud, a través de la Dirección de Epidemiología e Inmunizaciones, recomienda a la comunidad que mantenga completos los esquemas de vacunación, en función de lo que se establece en el Calendario Nacional para tal fin.
En este sentido, se lleva a cabo una campaña de inmunización Triple Viral (Sarampión, Rubéola, Paperas) e IPV (Poliomielitis). La misma tiene lugar en el Banco de Leche, durante los días 17 a 22 de octubre: de lunes a viernes de 07:30 a 13:30 horas y sábados 08:30 a 13:30 horas.
La campaña se orienta a niñas y niños de 13 meses a 4 años inclusive, quienes deben recibir las dosis adicionales, gratuitas y obligatorias de las vacunas Triple Viral (contra sarampión, rubéola y paperas) e IPV (contra poliomielitis), más allá de las dosis recibidas previamente. No requieren orden médica. También se recibirá a aquellas personas (de todas las edades) que requieran completar esquemas.
Tal como se explica desde el Ministerio de Salud de la Nación, en Argentina el sarampión, la rubéola y la poliomielitis son enfermedades que están eliminadas. Esto quiere decir que ya no circulan en nuestro país. Sin embargo, aún provocan brotes en otras partes del mundo. Por ello es importante mantener completos los esquemas de vacunación.
Desde la Dirección de Epidemiología del Municipio, se recuerda que todas las vacunas del Calendario Nacional son obligatorias, gratuitas y se aplican en vacunatorios, centros de salud y hospitales públicos del país. El calendario incluye vacunas para todas las etapas de la vida, situaciones especiales o para grupos específicos.
Es muy importante mantener completo el Calendario de Vacunación. Las vacunas constituyen una de las principales medidas para evitar un conjunto de enfermedades prevenibles por esta vía, que pueden ser graves para nuestra salud. Es nuestra responsabilidad y obligación que nos apliquemos las vacunas que nos corresponden durante todas las etapas de la vida, así como también acompañar a los más pequeños en este proceso, para evitar enfermarnos y contagiar a nuestra familia y otras personas.
Además, es fundamental tomar conciencia de que no sólo podemos enfermarnos nosotros, sino también contagiar a personas más vulnerables que no pueden recibir las vacunas por tener contraindicaciones para su aplicación.
Por ello se dice que la vacunación ofrece protección de la salud “en rebaño”: cuando la mayoría de las personas en una comunidad están correctamente inmunizadas, si alguien adquiere una enfermedad inmunoprevenible, la enfermedad probablemente no se propague, ya que en su entorno entra en contacto con otras personas que están protegidas. De esta forma, la diseminación de la enfermedad quedará limitada y no alcanzará a individuos susceptibles que no hayan podido vacunarse por contraindicación médica.