Como es habitual, en esta época del año particularmente, se lleva adelante la tradicional jornada de poda de rosas en la Plaza Central, donde se reparten gajos, para que luego puedan ser multiplicados en cada hogar.
Este jueves por la mañana se inició la actividad, que contó con una muy buena convocatoria por parte de la comunidad, superando incluso ediciones anteriores.
El intendente Ezequiel Galli participó de la jornada y dialogó con vecinas que se acercaron hasta el centro de la ciudad, para sumarse a esta propuesta, que resulta verdaderamente un éxito.
Durante la actividad, Galli estuvo acompañado por el secretario de Mantenimiento y Obras Públicas Julio Ferraro y el secretario de Desarrollo Humano y Calidad de Vida Diego Robbiani.
En el lugar, fueron recibos por la paisajista Ana Geoghegan -a cargo del área de Arbolado Urbano y Planificación del Paisaje- quien cada año se encuentra al frente de la propuesta.
La poda de los rosales se realiza siempre en invierno, para que puedan florecer en primavera, alcanzando su máximo potencial, dado por la belleza de su flor y su aroma tan particular.
Tras la poda, se preparan los gajos para que los vecinos se puedan llevar a su hogar, junto con un instructivo donde se explica cómo llevar adelante las tareas de enraizado.
Mañana viernes continuará la actividad, desde las 11:30 horas. Se entregarán hasta tres gajos por personas, de tres variedades diferentes de las que se encuentran plantadas en la plaza. Este tipo de variedades de rosas son elegidas por la belleza de su flor y la continuidad de la floración.
Las variedades de rosas con las que cuenta la plaza son:
– Rosa Meilland “Charles Aznavour”. De floración abundante y continua, hasta 7 flores por tallo. Agraciadas y románticas flores de color rosa pálido casi blanco con toques un poquito más oscuro, de 6 cm de diámetro. Planta de vegetación fuerte y muy sana de 60-70 cm de altura.
– Rosa Meilland Bonica. Flor rosada, muy florífera, racimos de flores pequeñas rosadas muy atractivas, muy sana Esta variedad excelente lleva racimos suaves de flores rosadas, y de tamaño pequeño a mediano. Éstos se producen muy libremente y se repiten bien. Hay una fragancia muy ligera. Si las flores no están muertas, serán seguidas por una maravillosa cosecha de brillantes frutos rojos, que durarán mucho hasta el invierno.
– Rosa Iceberg. El rosal ‘Iceberg’ es un arbusto vigoroso, con unas flores semi-dobles blanco puro y con un ligero perfume. Este rosal debe su celebridad a su excelente resistencia a las enfermedades, que le convierte en un candidato en todos los jardines. Refloreciente. Diámetro de la flor: 7 cm. La planta tiene una altura hasta 1.50 metros. Su floración perdura mucho tiempo, muy florífera.
¿Cómo llevar adelante el enraíce de rosas?
Actualmente, se tiende a la preparación de las estacas de menor longitud (15 o 20 cm) y aún menos (10 o 15 cm) y un grosor entre 6 y 10 mm, determinado por el largo de los entrenudos. Esta práctica permite un mayor aprovechamiento del material de multiplicación disponible.
Se recomienda eliminar la última hoja basal. Las demás hojas deben permanecer en perfecto estado, ya que esto contribuye a mejorar el enraizamiento.
En una bolsa plástica de las que usamos para congelar alimentos, se debe colocar un poco de nuestro sustrato habitual para rosas y humedecer con un poco de agua, la justa para mojar el sustrato, sin producir encharcamiento. Allí se podrá aplicar una hormona de enraizamiento, en el extremo inferior de la estaca, que luego se clavará en la tierra de la bolsa. Antes de cerrar la bolsa, se deberá vaporizar con un poco de agua sobre el esqueje.
Otra forma es colocar el sustrato es en una maceta, clavar la estaca y tapar con la mitad de una botella de plástico, que le haga de mini invernadero.