Desde el Bioparque Municipal “La Máxima” se informó que se obtuvieron resultados muy interesantes para el  Programa de Conservación del Guacamayo Rojo.

Dichos avances se dan el marco de procedimiento de extracción de plumas para el sexado de Guacamayos Rojos (dado que esta especie no tiene dimorfismo sexual) y el posterior envío de las muestras al  Laboratorio de Biología de la Conservación y Centro de Ecología Aplicada del Litoral (CECOAL), dependiente del CONICET para realizar el examen correspondiente.

Los resultados genéticos brindaron como información, que La Máxima cuenta con tres potenciales parejas reproductivas, esto resulta muy importante porque pone a nuestro Bioparque, en condiciones de sumar esfuerzos para que dicha especie vuelva a surcar los cielos de Argentina.

Sabemos que como ocurrió con  otras grandes aves de los bosques, el Guacamayo Rojo, ha sido exterminado tempranamente en muchos sectores de su área de distribución debido a la persecución directa, la desaparición del hábitat, la falta de áreas protegidas, el tráfico ilegal y el mascotismo que sufre esta especie. La población que vivía en el sur de Paraguay y el norte de nuestro país, incluyendo Corrientes, también se extinguió cerca del año 1850 quedando los registros históricos de su presencia.

Las actividades mencionadas fueron realizadas por el equipo veterinario del Bioparque “La Máxima” con la colaboración  del criador de psitácidos Nicolás Porfilio, a cargo del criadero autorizado “Había Una Vez”, el futuro veterinario Marcos Fiotto  y el estudiante avanzado Martín Godoy, quienes se están formando en fauna silvestre.

Este trabajo permitió además mejorar -junto a los cuidadores especializados de estas aves Adalberto Aquilano y Pablo Leal- los  recintos, nidos, dietas entre otras variables que hacen al éxito reproductivo de la especie.

Con el objetivo de reproducir nuevos individuos de Guacamayos Rojos para su reintroducción, el Bioparque “La Máxima” impulsa la formación de una red de cría ex-situ con Bioparques (Bioparque Temaikén,  Bioparque La Plata, Ecoparque Buenos Aires)  centros de custodia de vida silvestre ( CLT (Conservation Land Trust–Argentina) y centros  reproductivos autorizados (Haviaunaves) .

Se trabaja con otras instituciones en red, en pos de revalorizar la función social y científica que cumplen los bioparques, como guardas de la biodiversidad y herramienta para la conservación.

En este sentido, Flavio Maldonado (director del Bioparque Municipal “La Máxima) concluyó que “una sola institución no puede llevar adelante semejante tarea y es un orgullo para nosotros estar empujando para el trabajo conjunto y la formación de la red de conservación”.