Desde el Juzgado de Faltas, a cargo de la Dra. María Celia Alem, se dieron a conocer las últimas sentencias aplicadas sobre casos de alcoholemia positiva, que fueron comprobados en el mes de septiembre, en el marco de los controles de tránsito de rutina.
En este sentido, se trata de casos ocurridos en la jornada del 21 de septiembre, el primero de ellos registrado pasada las 04:30 horas, un conductor con 1,98 g/l –que casi llega a cuadriplicar el valor permitido para automovilistas- quien deberá abonar una multa de $25.865 y cumplir una pena accesoria de 18 meses sin conducir.
El segundo hecho quedó asentado cerca de las 06:00 horas del pasado sábado, tras detectar que un conductor manejaba con 1,83 g/l de alcohol en sangre. Con este porcentaje, le corresponde –al igual que la situación anterior- una multa de $25.865 y un plazo de 18 meses sin conducir.
El tercero ocurrió alrededor de las 09:00 horas, al verificar que un automovilista presentaba 1,37 g/l de alcohol en sangre, quien deberá pagar una multa económica de $24.571,75. En este caso, la inhabilitación para conducir es por 12 meses.
Desde el Municipio, más allá de los niveles permitidos, se hace hincapié en tolerancia cero al volante, porque debe considerarse que aún en concentraciones menores el alcohol produce importantes consecuencias en el organismo, generando alteraciones en el comportamiento y disminuyendo la capacidad de capacidad de conducir de manera idónea.
En todos los casos, el consumo excesivo provoca consecuencias, sobre las funciones psicomotoras, sobre la visión del conductor y sobre el comportamiento y la conducta.
El conductor experimenta un falso estado de euforia, seguridad y confianza en sí mismo, apareciendo un desprecio por el peligro y una tendencia a transgredir las normas.