Este domingo se celebró en la sede de la Asociación de Residentes Bolivianos de Olavarría (ARBO), ubicada en las calles de Santa Cruz y Pelegrino, los 198 años de la declaración de la Independencia del Estado Plurinacional de Bolivia.
El intendente Ezequiel Galli participó de la celebración junto al presidente de ARBO Alberto López e integrantes de la comisión directiva de la institución.
También se encontraban presentes referentes de la Dirección de Relaciones con la Comunidad, de la Unión de Colectividades de Olavarría, miembros del Honorable Concejo Deliberante, autoridades del Regimiento de Caballería de Tanques 2, Bomberos Voluntarios, y vecinos del barrio.
Alberto López (presidente de la ARBO) agradeció a todos los presentes por haber asistido, en esta día tan importante y significativo para su comunidad, donde se festeja con sus trajes típicos, procesión, costumbres, gastronomía y tradiciones. “El origen de los festejos en nuestro medio parte de la creciente colectividad de residentes bolivianos que desde la década de 1960, se mezcla lo religioso con las costumbres y manifestaciones artísticas del pueblo boliviano, una de las más grandes en Olavarría”, expresó López.
El domingo, en el marco de la celebración, los asistentes pudieron compartir diferentes comidas típicas para conocer y saborear, que fueron preparadas con mucha dedicación desde el día anterior para poder mostrar y vender.
La propuesta gastronómica permitió deleitarse con picante de pollo que es una guarnición de pollo con salsa a la portuguesa y arroz chuño, a base de papa deshidratada con el frío y se mezcla con maní. También hubo piquelomacho, que lleva picante y es un plato más moderno con papas fritas, salchichas, carne de cerdo, pollo, aceitunas, queso, cebollas y tomates. Otra posibilidad es el Majarito, que es arroz a la portuguesa pero sin arveja y carne trozada y el plato de Sucre que es mondongo a la tarateña, con mondongo frito. Por supuesto no faltó el chicharrón, el plato más famoso, a base de carne de cerdo con maíz cocido y pelado y papa. “La papa no puede faltar en nuestras comidas”, resaltó López tras enumerar todas las preparaciones que se realizaron para dicho festejo.
El jefe comunal resaltó la importancia de la integración de las distintas colectividades que existen y forman parte del Partido de Olavarría, en especial a las nuevas generaciones que heredan sus costumbres y tradiciones de cada país y felicitó a la comunidad boliviana por su aniversario.
Por su parte, Héctor Rojas, gran colaborador de la entidad, indicó que «la comunidad boliviana está dedicada especialmente a la agricultura y a la construcción, y todos estamos muy agradecidos con la comunidad olavarriense porque nos ayudan, nos dan ánimo, así como las autoridades municipales y de la Iglesia. Nuestro mayor deseo es que nuestros hijos queden con este legado y sigan cultivando nuestras costumbres».
“A pesar de ser un país pequeño tenemos muchas lenguas y una gran diversidad. Hablamos quechua en la zona andina y lo que es el sur de Bolivia, también se habla aymará en La Paz y el norte de Potosí y se habla guaraní también en la zona limítrofe con Brasil y Paraguay. Pero además hay distintos dialectos. Las lenguas se van perdiendo pero se mantienen otras costumbres», dijo el residente en Olavarría de Bolivia.
La alegría de los bailes típicos como el huayno y la cueca marcaron el cierre de la fiesta hasta el año próximo, cuando esta enorme familia de residentes bolivianos vuelva a homenajear a su tierra y a honrar a su Santa Patrona el próximo año.
