En la jornada de este lunes nació Mawun. Tras 58 días de incubación y luego de las 10 de la mañana, la segunda pichona de cóndor de la temporada (la primera nació a partir de un huevo puesto en el Bioparque Temaiken) pesó 201,75 gramos y su nombre significa “lluvia”.
En el Bioparque Municipal “La Máxima”, el nacimiento de Mawun se vive con mucha emoción ya que “luego de tanto esfuerzo –y años de trabajo– podemos decir que en Olavarría se volvieron a reproducir los cóndores, que nuestra ciudad es ‘cuna de cóndores’ y que para el Bioparque es un éxito después de tantos años de no tener reproducción”, indicó el director del espacio Flavio Maldonado.
Mawun es fruto de la consolidación del lazo reproductivo de Rawson y Curá. Fue el primer huevo fértil de esta temporada de la pareja de cóndores y estuvo en el Centro de Incubación Artificial del PCCA en el Ecoparque Buenos Aires. En este lugar es en el que se realiza la cría de las pichonas a través de títeres de látex -que representan a sus padres- y de manera aislada de los seres humanos, para evitar que se familiaricen con nuestra especie. Luego del tiempo prudencial de su crecimiento, Mawun y Tayel serán liberadas con una bandada de cóndores en la costa atlántica de la Patagonia en el año 2020.
El segundo huevo puesto por Rawson y Curá se encuentra en la condorera del Bioparque La Máxima y se espera el nacimiento para los primeros días de diciembre. “Le recomendamos a nuestros visitantes ser cautelosos durante el recorrido por el sector de la condorera”, señaló el director de La Máxima.
“Volvimos a tener reproducción, trabajamos cuatro años para tener este resultado. Los procesos biológicos necesitan de tiempo para consolidarse, tenemos mucho que aprender de los tiempos que dicta la naturaleza, tenemos que respetarlos y acompañarlos”, agregó Maldonado.
Actualmente Olavarría cuenta con tres parejas reproductivas de cóndores, en una clara muestra de participación activa e importante dentro del Programa de Conservación Cóndor Andino, de la Fundación Bioandina Argentina. Esto marca un claro desarrollo de los programas de Conservación en el Bioparque que desde el año 2004 forma parte de manera sostenida de este proyecto, habiendo producido la liberación de cóndores en la Patagonia Argentina.