Muchas veces cuando recorremos nuestro hogar, sin querer nos encontramos con muchas formas de vida que no conocemos. Desde el Bioparque “La Máxima” pensamos que sería útil brindarte la información para que puedas conocerlos y de esta manera saber un poco más sobre la fauna que tenemos en cualquier jardín de nuestra querida ciudad
Nos pasa a menudo que nos cruzamos con una araña o cualquier animal al que le decimos “bichito” y nos paralizamos. Actuamos con miedo o precaución y gritamos, salimos corriendo, los matamos o algunos más exploradores les sacamos fotos.
Inmediatamente en nuestro interior surgen las preguntas: ¿cuántos más hay?, ¿los llevó a La Máxima?, ¿los liberó más lejos?, ¿es mejor matarlos?, ¿por qué les tengo miedo?, ¿son peligrosos?, ¿qué hago si me pican?
Para responder estas preguntas vamos a darte las herramientas para que puedas responderlas rápidamente.
En el Bioparque se trabaja en la conservación de la Biodiversidad, buscamos estrategias de acción y educación que nos permitan avanzar en el conocimiento y protección de nuestros seres vivos. Hemos reunido un grupo de especialistas, docentes, entomólogos aficionados y fotógrafos para desarrollar un proyecto de Educación para la Conservación, desarrollando un libro de divulgación científica sobre los habitantes poco conocidos de nuestras casas y jardines.
Biodiversidad cotidiana
Es sorprendente lo poco que sabemos sobre la biodiversidad (diversidad de especies que viven en un espacio determinado) de los entornos urbanos y, más aún, lo poco que sabemos sobre la biodiversidad en nuestras viviendas. Hasta ahora, creíamos que, luego de utilizar durante muchos años insecticidas y productos químicos, prácticamente habíamos acabado con ella, pero un reciente estudio ha sacado a la luz que, aunque ni se nos pase por la cabeza, cada día convivimos con más de doce especies distintas de insectos en nuestras propias casas.
Convocatoria
Aunque el trabajo que podemos hacer es limitado, desde el Bioparque Municipal “La Máxima” impulsamos junto a especialistas, docentes, entomólogos aficionados y fotógrafos un proyecto de Ciencia Ciudadana “Los bichos de tu casa y de mi casa”.
El trabajo implica la elaboración de material educativo y un relevamiento de “bichos” típicos del hogar. Para esto convocamos a los vecinos a que puedan enviar su fotografía a la página del Bioparque Municipal www.facebook.com/bioparquelamaximaoficial para identificarlos y tener una referencia del tipo de especies presente en los hogares de Olavarría.
De esta manera los invitamos a que puedan compartir fotografías, que en lo posible tengan una referencia de tamaño, si es posible una escala (se adjunta en Imagen 2) también podemos utilizar un objeto que pueda servir como referencia y que sea de tamaño conocido como una moneda o un capuchón de lapicera. Es importante que en el momento de tomar la foto tengamos en cuenta:
¿Qué debemos fotografiar?
Alas, patas abdomen cabeza y todo aquello que nos llame la atención y creemos que sirve para su correcta identificación.
Datos de interés
Una de las estimaciones más conservadora, arroja entre 32 y 211 morfoespecies, y entre 24 y 128 familias de artrópodos por casa se encontraron en un estudio científico en los EE.UU. Una increíble diversidad. No queremos ni imaginar las reuniones de la comunidad de vecinos si a los insectos les diera por hablar.
En efecto, el estudio de Bertone y colaboradores (2016) se ha realizado en un grupo de viviendas de Carolina del Norte por lo que no debemos esperar que las proporciones sean exactamente iguales (ésta guarda una relación directa con el entorno medioambiental).
Intentaremos desde el Bioparque comprender un poco mejor el inmenso mundo que vive tranquilamente en nuestras casas.
Según los resultados del censo, con un 23%, las moscas y mosquitos aparecen como el artrópodo más común en las cincuentas casas estudiadas. No se puede decir que sea una sorpresa. Les siguen las arañas (19%), los escarabajos (16%), himenópteros (hormigas, abejas, avispas) (15%), piojos (4%), hemípteros (pulgones, cigarras o chinches) (4%).
Curiosamente, de las 93 especies identificadas por el estudio muy pocas de ellas eran lo que normalmente consideramos plagas (cucarachas, pulgas o chinches). «De hecho, nos encontramos con una relativa escasez de plagas típicas del hogar», dicen los autores. Es decir, que la mayor parte de insectos pasan desapercibidos. La opción más probable es que la mayoría de estas especies haya co-evolucionado con nosotros y vivamos en una intensa simbiosis.
Sobre este tema, precisamente, sabemos muy poco. Nuestro gusto por exterminarlos está, en general, injustificado: ni conocemos los posibles beneficios ecológicos, ni conocemos las posibles desventajas de convivir con más de una docena de artrópodos de forma habitual. Tampoco sabemos el impacto, las potencialidades y las consecuencias que esto tiene para la arquitectura y el diseño urbanístico. Lo que sí está claro es que «la biodiversidad en los paisajes urbanos es mucho más rica de lo nosotros pensábamos».
