Ante la proximidad del Viernes Santo y la celebración de la Pascua, la Dirección de Bromatología brinda las siguientes recomendaciones al momento de comprar, preparar y consumir pescados y mariscos:
Pescado fresco:
– Puede tener un ligero olor a pescado, pero nunca intenso.
– Los ojos deben estar siempre brillantes, no hundidos.
– Las agallas rojas, las escamas adheridas al cuerpo y su carne firme.
– Pigmentación viva y brillante.
– La columna vertebral firmemente adherida a los músculos.
Pescado en conserva
– Las latas no deben presentar abolladuras, ni estar hinchadas u oxidadas. Debe tener en cuenta los rótulos, procedencia o fecha de vencimiento.
Pescado – mariscos congelados.
No debe presentar signos de escarcha o cristales de hielo en el envase.
Además se sugiere que, al momento de realizar la compra de este tipo de mercadería, si el comercio se encuentra alejado del hogar, se disponga de una conservadora y hielo para transportar los pescados y mariscos.
En casa:
– Separar los pescados y mariscos crudos de aquellos alimentos listos para consumir.
– Lavar las tablas de cortar, los platos, los utensilios y las superficies de trabajo con agua caliente y detergente después de estar en contacto con pescados crudos.
– Cocinar el pescado completamente, hasta que al cortarlo presente una coloración blanca o leche opaca.
– Cocinar los moluscos bivalvos hasta que se abran, lo cual es señal que están cocidos.
– Consumir lo antes posible y no dejar enfriar a temperatura ambiente.
Ante cualquier consulta comunicarse con la Dirección de Bromatología al 02284-423737.
